El Port de Barcelona enciende las luces de la segunda edición de ‘Nadal al Port’

El Port de Barcelona ha inaugurado esta noche la segunda edición de ‘Nadal al Port’ con un acto que ha dado el pistoletazo de salida al acontecimiento navideño, que se celebrará del 2 de diciembre al 6 de enero en el moll de la Fusta. La presidenta del Port de Barcelona, Mercè Conesa, y un grupo de cuatro niños y niñas, hijos de trabajadores del Port de Barcelona, han sido los encargados del encendido de luces.

Uno por uno los niños han pulsado el botón que ha iluminado cada uno de los elementos que conforman ‘Nadal al Port’. Primero, los barcos históricos del Museu Marítim y las palmeras iluminadas han convertido en un bulevar de luz el moll de la Fusta. A continuación, la lámina de agua de enfrente del muelle se ha iluminado con la representación del nacimiento y de la llegada de los reyes magos de Oriente. El árbol de Navidad más grande de toda Cataluña, con 31 metros de altura, ha sido la última pieza en encenderse, dando paso al espectáculo de luz, música y color que cada tarde, a partir de las 17.30 horas, se podrá disfrutar en el Port Vell de Barcelona.

El villancico del Fum, fum, fum interpretado por el Orfeó Català del Palau de la Música y éxitos más internacionales como Last Christmas de George Michael o la canción central de la banda sonora de Piratas del Caribe se podrán disfrutar cada tarde en el muelle de Bosch i Alsina.

Una Navidad de luz en el Port

“Desde el Port de Barcelona, en el ámbito de puerto-ciudad, tenemos toda la voluntad de sumar con la ciudad de Barcelona para poder planificar, de manera conjunta, actividades al aire libre, actividades orientadas a las familias y a los barceloneses y barcelonesas. También, queremos dar todo el apoyo al comercio de la zona, restauradores y gastronomía, a todas aquellas actividades que llenan el Port Vell,” ha explicado Conesa durante la bienvenida del acto.

La presidenta del Port de Barcelona también ha destacado que la celebración de ‘Nadal al Port’ ha sido “muy meditada” y que se ha priorizado la seguridad “por delante de todo”. Así, se ha habilitado un recorrido cerrado y unidireccional que será controlado por personal de seguridad que requerirá un código QR a los visitantes, que podrán conseguir en los accesos al árbol y que permitirá controlar el aforo en todo momento.