Ecología y biodiversidad

El puerto ocupa una superficie terrestre de 1.042 hectáreas y se encuentra próximo a la Reserva Integral del Delta del Llobregat. La protección de la biodiversidad en su territorio y su entorno es una responsabilidad que ejerce activamente con medidas de control y de actuación, tanto respecto de las especies protegidas como de las potencialmente invasivas.

Espacios naturales y especies protegidas

El Port de Barcelona vela y actúa para que la actividad y las obras portuarias interfieran en la menor medida posible sobre los ecosistemas y las poblaciones de aves y otras especies. Tanto del territorio portuario como de su entorno más próximo.

Interacción con el entorno

Gracias a la intervención proactiva del Departamento de Medio Ambiente de la Autoridad Portuaria de Barcelona, un total de 8.000 m2 dentro del área del puerto se puede considerar destinada a la conservación y promoción de la biodiversidad.

Más allá del puerto

Pero además, la proximidad de la Reserva Integral del Delta del Llobregat obliga también al Port de Barcelona a extremar precauciones y tomar partido para proteger espacios y especies más allá de los límites del puerto.

Especies protegidas

falco

Control de aves

Algunas especies de aves deben ser controladas por las molestias y daños que pueden causar en las instalaciones portuarias. Es el caso de palomas y gaviotas. Para estas últimas, desde el año 2000 se realiza un control disuasorio en los muelles de terminales mediante altavoces que emiten reclamos continuados.

 

Efecto disuasorio

Para reducir el número de palomas que van a alimentarse al área portuaria, el mejor método es la presencia del halcón peregrino (Falconus peregrinus). En los años 2001/2002 el Port participó en la reintroducción de esta ave en la ciudad, con la cría de 3 crías en un nido artificial en un silo de grano. En 2020 criaron en el puerto 3 parejas de las 9 de halcones que hay en Barcelona, consolidando esta población.

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Especies invasivas y control de fauna

En el puerto se realizan estudios y seguimiento de especies animales y vegetales para detectar especies alóctonas que pueden derivar en invasoras. De todas las detectadas e identificadas no hay constancia de presencia de especies introducidas, excepto una mención en la literatura científica de la presencia en los años 90 de Alexandrium catanella en fitoplancton.

Los controles de los fondos sedimentarios de las aguas portuarias tampoco han detectado especies invasivas entre las comunidades bentónicas, aparte de alguna presencia esporádica y aislada.

Vías de introducción y efectos

Hay numerosas vías de introducción de especies en un puerto:

  • En el desprendimiento de las incrustaciones del casco de las embarcaciones (del fouling).
  • Por medio del envase de la mercancía, por ejemplo, de un contenedor.
  • En el interior de la propia mercancía.

Sin embargo, la que está sometida a mayores protocolos es la descarga de las aguas de lastre de los buques.

¿Por qué?

Porque es una vía de introducción de organismos extraños potencialmente invasivos. Los buques las utilizan para mantener la estabilidad y equilibrarse durante la carga y la descarga de la mercancía y las expulsan en caso necesario. En los tanques de lastre, el agua y los sedimentos pueden contener organismos, bacterias y virus que pueden permanecer con vida durante semanas y meses y pueden ser arrastradas a las aguas portuarias.

Las especies alóctonas pueden llegar a provocar el desplazamiento de las comunidades locales y modificaciones profundas en el nuevo ecosistema, con graves pérdidas de biodiversidad y otros daños.

Normativa específica

La Organización Marítima Internacional (OMI) aprobó en 2004 el Convenio Internacional para el Control y Gestión del Agua de Lastre y Sedimentos de los Buques, que requiere que todos los buques implementen un Plan de Gestión de Agua de Lastre y Sedimentos y dispongan de un sistema propio de filtración o esterilización para la descarga de las aguas de lastre en otros puertos alejados del punto de toma de agua. El gobierno español ratificó el convenio en 2016.